Las novedades del joven Luciano Arruga, muerto en febrero de 2009, generaron gran impacto e hicieron que la Comisión de Familiares y Amigos renovara sus críticas no sólo a la Policía Bonaerense sino a lo que ellos denuncian como una "trama mafiosa de complicidades con el Poder Judicial", explicó uno de sus miembros, Matías, en diálogo con Buenos Aires 2punto0.
Sucede que el magistrado recabó el testimonio de los implicados y testigos el día de su fallecimiento, cuando pierde la vida tras ser embestido por un auto en circunstancias poco claras, en el cruce de Genera Paz y Emilio Castro. Por ejemplo, uno de los testigos es un joven motociclista que, la madrugada del 1° de febrero, pasó por la zona y asegura que ahí cerca había una camioneta de la fuerza, sin las balizas puestas.
El conductor del vehículo que lo atropelló, mientras tanto, atestiguó que Arruga corría como si tratara de escapar. Las hipótesis y reconstrucción son una incógnita pero sus seres cercanos creen que hay cabos sueltos.
"En el marco de este supuesto accidente, el juez llama a declarar a todos los implicados en el accidente", reveló Matías.
"Está la declaración del conductor del auto: lo ve al costado de una banquina, como escapando de algo", puntualizó.
"La segunda persona que llega al lugar es en moto, decide parar para destapar el cuerpo, y describe una camioneta de la Policía Bonaerense. La realidad es que poco sabemos del daño que esa noche le estuvieron haciendo a Luciano, estos enfermos con licencia para matar están asediando a los jóvenes, no tenemos el detalle fino", lamentó.
"Lo que está claro es que está la mano de la Bonaerense, al servicio de un aparato que se formó en la dictadura", siguió.
"Esto le pasó a un nene, tenía sólo 16 años cuando pasó todo esto; la desprotección de los chicos frente a estos tipos que están protegidos por un entramado de mafiosos", concluyó.
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